viernes, 23 de marzo de 2012

PARA SALIR DE LA MATRIX

Mind Surf - Navegar por la Mente 
 Para salir de Matrix
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:: Introducion ::
¿Qué es la Matrix? ¿Qué hay fuera de la Matrix? ¿Por qué estamos en la Matrix? ¿Qué es el ego? ¿Qué es el Espíritu? ¿Cómo creamos la ilusión que llamamos realidad? ¿Qué es la iluminación o ascención? ¿Cómo salir de la Matrix? ¿Cuál es el camino hacia la iluminación? ¿Para qué salir de la Matrix? ¿Qué es una experiencia mística?
¿Quiénes nos pueden ayudar? ¿Qué es la Nueva Era?
¿Qué es Mind-Surf y cuál es su propósito? ¿Cómo puedes colaborar con Mind-Surf?
¿Qué es la Matrix?
Utilizando las claves y arquetipos presentados en la película "The Matrix", podemos entender que hay una existencia ilusoria y otra existencia real. La existencia que Neo experimenta cotidianamente en su trabajo como informático en una empresa de sistemas, vendría siendo la existencia ilusoria o la "Matrix".
Nuestros científicos más vanguardistas, analizando las implicaciones de los descubrimientos de la física cuántica, están hablando ya de que no existe una realidad material tal como la habíamos concebido. Han observado que las partículas más pequeñas no tiene una localización precisa, de tal manera que sólo "muestran tendencia a existir". Además son partículas y ondas a la vez, dependen del observador para presentarse como una cosa o la otra, se afectan unas a otras sin ningún tipo de contacto entre ellas y vibran a frecuencias tan altas que pueden dar la "apariencia" de solidez. Así pues, a nivel científico, se sabe ya con certeza que vivimos en un mundo que no es como lo percibimos, sino que simplemente aparenta serlo, como la Matrix.
Las grandes tradiciones místicas y esotéricas han señalado desde el comienzo de la historia humana que esta existencia que experimentamos como "realidad" no es tal. Los vedas y posteriormente los budistas, la llamaron "Maya"; los cabalistas la conocen como la "primera esfera" y le denominan "Malkut"; los alquimistas se refieren al "mundo de los sentidos" y le dicen la "Obra"; los mayas y los toltecas hablan del "Sueño"; los sufíes de la "ilusión"; para los inkas es "Yoke"; y algunos grupos de orientación cristiana incluso la han identificado con el "infierno". A esta existencia ilusoria también se le conoce como la "dualidad" o el mundo de la "separación".


¿Qué hay fuera de la Matrix?
La física cuántica especula ya acerca de uno o más planos no visibles donde todo está concectado entre sí, lo cual resultaría ser la única respuesta lógica para los fenómenos inexplicables, tanto de tipo paranormal como puramente físicos, tales como el hecho de que las ondas-partículas se afecten entre sí aun sin contacto alguno de por medio. Cada vez más, nuestros científicos hacen referencia al orden manifiesto (lo que vemos) y al orden implicado (lo que no vemos).
Las tradiciones místicas y esotéricas explican que en el orden implicado, esto es, la realidad o la existencia no ilusoria, hay distintos planos de conciencia intermedios entre la ilusión de la separación, que es lo que nosotros percibimos cotidianamente, y la verdad última, que es La Unidad del Todo (el Tao, Dios, el Uno, el Gran Espíritu, etc.). Se dice que estos planos (también llamados octavas, dimensiones, estados o mundos), coexisten tal como nuestras ondas de radio en el espacio aéreo. Cada plano alberga otro tipo de formas de vida o conciencias que difieren unas de otras por el hecho de vibrar en frecuencias más bajas o más altas que las nuestras o simplemente no están en coordenadas espacio/temporales por lo que ya no se puede hablar de cosas como "vibraciones por segundo".
En estos diversos planos se suelen ubicar desde las presencias desencarnadas y los espíritus errantes, hasta los "ángeles", "arcángeles", "santos", "devas", "guías", "seres extrafísicos", "maestros ascendidos", "presencias crísticas", "eloims", etc. Existen diversos modelos que clasifican estos planos de acuerdo a sus funciones y características (nivel astral, conciencia colectiva, mundo causal, conciencia crística, esfera del "Ser Superior" o "Presencia Yo Soy", etc.). Para algunos, éstos planos de conciencia son lo que hay fuera de la Matrix, para otros, son otras partes de la Matrix y lo que sea que haya fuera del Universo y sus múltiples dimensiones sería lo que hay fuera de la Matrix. En conjunto los cabalistas les llaman las "esferas intermedias", los mayas y toltecas "el mundo del Espíritu", los inkas "Paña", y los cristianos el "Espíritu Santo", por ejemplo.
Englobando estos mundos o planos, todas las tradiciones coinciden en ubicar el estado de la unidad total, donde la paz, la felicidad y el amor son absolutos. Los budistas le llaman "el Nirvana", los cabalistas "la Luz", los alquimistas "la Fuente", las mayas "la Causa", los sufíes "la Verdad", y los cristianos "el Cielo". También se le conoce como "el estado de indiferenciación" o "la Unidad". Alcanzar este plano se describe como el regreso al estado primigenio en donde se es Uno con el origen de la Creación, con el Espíritu, con Dios/Diosa/Todo lo que Es.
(Más información en: Dimensiones)


¿Por qué estamos en la Matrix?
Los mitos de distintas culturas, las particulares cosmivisiones de las tradiciones místicas, y las explicaciones de maestros ascendidos y seres extrafísicos cuyas enseñanzas han sido telepáticamente canalizadas por humanos con inusuales capacidades de percepción extra sensorial, coinciden de manera prácticamente unánime en hablar de una "caída" o "descenso" del Espíritu al mundo de la materia o el plano físico, que es la Matrix.
El Uno o el Gran Espíritu, cuya esencia es el Amor y cuya vocación es la Creatividad, se extiende a sí mismo o se subdivide en partes individuales pero a la vez perfectamente unidas e integradas al Todo. Esta subdivisión se lleva a cabo en una forma que nuestros científicos llamarían holográfica, puesto que cada parte conserva en sí misma el Todo. Las partículas espirituales que conservamos la misma esencia y el mismo poder creativo del Creador, creamos a nuestra vez ilusiones, juegos o experimentos para conocernos a nosotros mismos explorando las diversas manifestaciones del Uno.
Dentro de estos juegos o experimentos, uno de los más arriesgados consiste en olvidarse completamente de nosotros mismos, de nuestra identidad espiritual y de nuestro Creador. Para ello creamos una Matrix que es un auténtico simulador de limitaciones respecto al poder y la creatividad ilimitadas del mundo del Espíritu. Luego nos metemos en el simulador donde no hay eternidad y ubicuidad, sino tiempo y especio; donde no hay unidad sino división, donde no recordamos que somos Espíritu, y creemos que somos cuerpos... Y el juego consiste en recordar lo que en verdad somos para poder salir de la Matrix.
Algunos seres nunca se han encarnado en una "dualidad" porque consideran que éste es un juego demasiado peligroso por el dolor, el miedo y el desamor que son los subproductos del olvido de uno mismo. Otros seres en cambio valoran mucho la incursión en la dualidad por el tipo de experiencias que se pueden tener dentro de ella. Aquí difieren bastante las opiniones. Hay quienes hablan de "la caída" como un error debido al deseo de especialidad y/o de poder que algunos seres sentimos; otros dicen que ocurrió debido a la fascinación que como Espíritus desarrollamos por la materia; otros aseguran que éste es un experimento que se salió de proporción respecto a su propósito original; y otros más que es un experimento exitoso porque los seres involucrados en él estamos aprendiendo muchísimas cosas.
Sea como sea e independientemente de las valoraciones que reciba la Matrix, todas las fuentes coinciden en señalar que cada uno de los seres que creemos estar en esta ilusión colectiva, elegimos encontrarnos aquí por nuestra propia voluntad y, de igual forma, tenemos el poder de elegir salir de ella cuando en verdad lo deseemos.


¿Qué es el ego?
El ego es el nombre genérico que recibe el sistema de pensamiento limitante que nos mantiene anclados en la Matrix. Los budistas le llaman "Mara"; los cabalistas judíos, "Amalec"; los alquimistas, el "Guardián"; los inkas el "Uku Pacha" y muchos terapeutas se lo dividen en "ego negativo" y "ego positivo".
El Maestro Ascendio Jesucristo, un especialista en el estudio del ego y cómo trascenderlo, dice: "Su existencia depende de tu mente porque el ego es una creencia tuya. El ego no es más que una confusión con respecto a tu identidad... No le tengas miedo al ego. Él depende de tu mente, y tal como lo inventaste creyendo en él, puedes asi mismo desvanecerlo dejando de creer en él... Cuanto más aprendas del ego más te darás cuenta de que no se puede creer en él..."
(Más información en: La Puerta del Maestro Ascendido Jesucristo)



¿Qué es el Espíritu?

Es la parte de nosotros que sigue recordando quiénes somos y que nos guía de regreso a la Totalidad. Algunos le llaman el Maestro Interior, el guía interno, el Ser Superior, etc.
(Más información en La Puerta de Serapis)


¿Cómo creamos la ilusión que llamamos realidad?
Con la suma de nuestros pensamientos y sentimientos que son resultado de nuestras creencias. Los humanos somos como antenas de una radioemisora y radiamos las 24 horas del día lo que sentimos y pensamos. El Universo trae a nuestro campo de experiencias el equivalente de aquello que estamos radiando y de esta manera atraemos personas, situaciones y cosas a nuestra realidad que tienden a confirmar nuetras creencias. Así es que mientras no cambiemos nuestras creencias, no podemos cambiar nuestra "realidad".
(Más información en: los textos adjuntos de La Puerta de los Pleyadianos y en el texto adjunto de La Puerta de Lazaris)


¿Qué es la iluminación o ascención?
Lo que Neo experimenta tras la "revelación" de saberse invulnerable a las balas de sus enemigos. O sea, el regreso a nuestra esencia y no simplemente el cambio de una "realidad" limitada a otra menos limitada.
La ascención o iluminación no es un hacer sino un ser. Es el abandono de un sistema de creencias limitante y la adopción de uno ilimitado. Es un estado de ser en el que la felicidad y el éxtasis son el estado cotidiano de conciencia.
(Más información en: Ascención)



¿Cómo salir de la Matrix?

Básicamente hay que creer primero que esto sea posible y deseable, y después unificar nuestra voluntad para hacerlo.
El proceso para conseguirlo consiste en trascender el ego, o sea el sistema de pensamiento limitante que nos mantiene anclados en la Matrix. Este es el proceso que siguieron Buda, Jesucristo y los demás Maestros Ascendidos.
Neo no sale cuando despierta en otra "realidad" o dimensión y continúa luchando con las máquinas, sino cuando se da cuenta de que no necesita defenderse porque en realidad es invulnerable, porque es hasta entonces cuando recuerda y recobra su esencia.
(Más información en: Ascención)


¿Cuál es el camino hacia la iluminación?
No hay un solo camino hacia la ascención. Cada uno de los Maestros Ascendidos que han escapado de la Matrix lo logró de una forma distinta, por eso se habla de que hay diferentes caminos para alcanzar la iluminación o ascención y a la vez se dice que todos son el mismo: salir del miedo y la ignorancia para regresar al amor y la luz con la que fuimos creados.
(Más información en: Ascención)


¿Para qué salir de la Matrix?
Para dejar de sufrir y para ser permanentemente felices. Para recobrar nuestra esencia de amor y creatividad, para recordar quiénes somos, para abandonar las limitaciones y regresar a Casa, de donde en realidad nunca hemos salido, pues el tiempo y el espacio no existen ya que esto es una ilusión...
(Más información en: Ascención)


¿Qué es una experiencia mística?
Es una vivencia que nos relaciona con el orden implicado, con lo que hay más allá de la ilusión de la Matrix. Generalmente se vive como una revelación o un éxtasis cuya característica principal es la profundidad de una sensación de plenitud, amor, paz y/o unidad con la naturaleza, con la humanidad o con el Todo. Durante la misma, pueden tener lugar algunas visiones literales, arquetípicas o simbólicas y en ocasiones también puede darse el caso de que la persona entre en contacto con seres de otros planos quienes le proporcionan ayuda, enseñanza, sanación o consejo.
Las experiencias místicas pueden ser expontáneas o deliberadamente buscadas. En el primer caso se engloban las experiencias paranormales, tanto de personas ordinarias como de aquellos que hemos llamado santos, médiums, clarividentes, canales, etc. Estas vivencias místicas espontáneas pueden suscitarse bajo cualquier tipo de condiciones inesperadas o en virtud de accidentes, operaciones o estados de enfermedad casi fatales que se denominan genéricamente Experiencias Cercanas a la Muerte (ECM). En el caso de las prácticas deliberadas, el común denominador es la inducción de modificaciones en nuestro estado ordinario de conciencia a través de técnicas de meditación, ayunos prolongados, respiración holotrópica o ingestión de plantas o sustancias psicoactivas, esto es, capaces de alterar el Sistema Nervioso Central (SNC).
Dada la amplitud de manifestaciones y nuestra escencia divina común, cualquier ser humano puede tener algún tipo de experiencia mística en su vida, tanto de forma esporádica como de forma regular si se empeña en lograrlo.
(Más información en La Puerta del Águila Dorada)


¿Quiénes nos pueden ayudar?
Algunos seres más evolucionados que existen en otras dimensiones dentro del Universo. Por ejemplo: los Maestroas Ascendidos (como Buda, Jesucristo y Saint Germain) y los Maestros extrafísicos que están siendo canalizados por diferentes personas en distintos lugares del mundo; los que conocemos como ángeles, arcángeles y serafines, que son nuestros guías personales, locales y planetarios influenciándonos desde otras dimensiones; así como los seres de luz que también habitan en otras dimensiones como los Pleyadianos, los Arcturianos y los Ashtar, por ejemplo. Todos ellos nos están ofreciendo enseñanzas muy valiosas
(Más información en La Puerta de Kryon)


¿Qué es la Nueva Era?
Durante su ciclo elíptico por la espiral de Las Pleyades, la Tierra atraviesa en dos ocasiones por la banda de fotones donde se ubica Alcyone, la estrella central de Las Pléyades. Esto ocurre cada 26,000 años.
El contacto con la banda de fotones es el equivalente a estar dentro de un micro ondas cósmico que eleva la vibración del sistema solar, y por supuesto de la Tierra y la de todos sus habitantes produciendo una aceleración en la evolución natural de la conciencia individual y colectiva.
El sistema solar entró en la banda de fotones en 1987 y cada vez estaremos más imbuidos en ella conforme transcurra el ciclo de aproximádamente 2000 años en que viajaremos dentro de ella.
A esto se le conoce como la Nueva Era o la Era de Acuario.
(Más información en: La Puerta de los Pleyadianos)



¿Qué es Mind-Surf y cuál es su propósito?
Es un sitio web al que consideramos un portal de la Matrix porque contiene información canalizada desde distintas dimensiones para ayudarnos a salir de la ilusión que llamamos realidad.
Se estrenó el 2-02-2002, bajo el propósito de servir como enlace entre los humanos encarnados en el planeta Tierra que desean salir de la Matrix durante la Era de Acuario y los seres extrafísicos que sirven a la luz y desean ayudar aportándonos instrucción, apoyo, consejos e información relevante y oportuna para instaurar el Plan Divino en la Tierra. Aquí sólo hay información procedente de la luz guiada por el amor. Aquí sólo hay información procedente de la luz guiada por el amor. Aquí sólo hay información procedente de la luz guiada por el amor. Así es.


¿Cómo puedes colaborar con Mind-Surf?
Leyendo el contenido de esta web, recomendándola a tus seres queridos y enviándonos tus opiniones, comentarios y colaboraciones a info@mind-surf.net
Muchísimas gracias a todos.
Amor y Luz
INLAKESH

EL LENGUAJE CORPORAL

Lenguaje Corporal


                                                                         Héctor A. García

¡Cuidado!
Tus movimientos te delatan

ACTO
LO QUE REFLEJA
Acariciarse la quijada
Toma de decisiones
Entrelazar los dedos
Autoridad
Dar un tirón al oído
Inseguridad
Mirar hacia abajo
No creer en lo que se escucha
Frotarse las manos
Impaciencia
Apretarse la nariz
Evaluación negativa
Golpear ligeramente los dedos
Impaciencia
Sentarse con las manos agarrando la cabeza por detrás
Seguridad en sí mismo y superioridad
Inclinar la cabeza
Interés
Palma de la mano abierta
Sinceridad, franqueza e inocencia
Caminar erguido
Confianza y seguridad en sí mismo
Pararse con las manos en las caderas
Buena disposición para hacer algo
Jugar con el cabello
Falta de confianza en sí mismo e inseguridad
Comerse las uñas
Inseguridad o nervios
La cabeza descansando sobre las manos o mirar hacia el piso
Aburrimiento
Unir los tobillos
Aprensión
Manos agarradas hacia la espalda
Furia, ira, frustración y aprensión
Cruzar las piernas, balanceando ligeramente el pie
Aburrimiento
Brazos cruzados a la altura del pecho
Actitud a la defensiva
Caminar con las manos en los bolsillos o con los hombros encorvados
Abatimiento
Manos en las mejillas
Evaluación
Frotarse un ojo
Dudas
Tocarse ligeramente la nariz
Mentir, dudar o rechazar algo
TRUCOS
Usa tus ojos para hablar

Los ojos son las ventanas del alma. La persona que mira limpiamente a los ojos de otros es una persona segura, amistosa, madura y sincera. Sus ojos y su mirada pueden decir tanto porque expresan prácticamente todas las emociones: alegría, tristeza, inquietud, tensión, preocupación, estimación o respeto. Por sus ojos muchas veces se puede saber lo que está pensando. Por eso, constituyen una ayuda poderosa en la conversación.



El uso adecuado de las manos

Tus manos se pueden aprovechar muy bien para complementar tus palabras y dar mayor fuerza a tu conversación. No las utilices inútilmente y mucho menos para hacer cualquier cosa que distraiga a la otra persona. Tampoco las uses violentamente, palmoteando o pasándoselas casi en el rostro a la otra persona.



Cuidado con lo que tocas

Hay muchas personas que siempre están dando palmadas en la espalda o tocando a los otros en los brazos, como para llamar su atención. Es bueno demostrar cariño, pero también hay que guardar el debido respeto a los demás. Muéstralo no tocando a la otra persona innecesariamente. Hay quien se siente muy molesto si le tocan, ten cuidado. Pero tampoco hables o escuches con las manos metidas dentro de los bolsillos porque eso denota indiferencia y mala educación.



Gestos que denotan impaciencia o aburrimiento

La actitud física demuestra lo que el alma está sintiendo. Si alguien finge interés en una conversación, la otra persona se dará cuenta muy fácilmente por sus gestos y ademanes. Moverse nerviosamente o levantarse, cruzar y descruzar las piernas, moverse en el asiento o mirar constantemente el reloj demuestra aburrimiento y es una gran falta de respeto. Si tienes que mirar la hora, hazlo en el reloj de otro.



Aprender a sentarse

Aprende a sentarte tranquilo y comportarte cuando se escucha. Reparte equitativamente el peso de tu cuerpo para no cansarte mientas estás sentado conversando. Si te sientas en el borde de la silla, es indicativo que deseas irte tan pronto como sea posible.
Si cambias constantemente de posición, estás expresando a gritos que estás aburrido. Si mueves incesantemente los pies durante la conversación, tu interlocutor pensará que estás molesto, inseguro, irritado, nervioso, cansado o aburrido. Sitúate en una posición cómoda y descansada que te permita respirar mejor y manejar mejor tu voz.



Control de la mirada

Cuando estés hablando con alguien, no estés mirando a todos lados: a la ventana, al techo, al suelo o limpiando sus uñas. Tampoco mires morbosa y curiosamente los zapatos, pantalones, camisa o peinado del que habla. Mantén el contacto ocular, pero sin fijar en exceso la mirada: eso lo hacen los locos. De todas formas, si quieres fijar la mirada durante mucho tiempo en alguien sin cansarte psicológicamente, mira su entrecejo. Para el otro/a no hay diferencia.



Control de las expresiones del rostro

¡Sonríe! Intercalar sonrisas cálidas y francas en la conversación transmite confianza, alegría y buena disposición. Sin embargo, no exageres. Sonreír demasiado frecuentemente puede convertir el gesto en una especie de mueca y dar la impresión de que es algo hueco, vacío y fingido. Apretar exageradamente los labios puede delatar que tienes dudas o desconfianza acerca de lo que el otro está diciendo o sugerir que no estás expresando realmente lo que piensas o sientes.


Conclusiones


Todo lo que aquí has leído, es una muy pequeña parte sobre el tema del lenguaje corporal. Espero que te haya sembrado inquietudes. Desde luego, puedes empezar a practicar cuanto antes. Además, hay abundante bibliografía en el mercado.

Contenido original ã 1996-2004 [www.proyectosalonhogar.com].

Hecho totalmente en la Isla del Encanto (Puerto Rico)

LOS FRUTOS DEL ESPIRITU SANTO.

LOS FRUTOS DEL ESPIRITU SANTO 

Los frutos del Espíritu Santo son doce:


1.
Caridad: El acto de amor de Dios y del prójimo.
2. 
Gozo espiritual: El que nace del amor divino y bien de nuestros prójimos.
3.
Paz: Una tranquilidad de ánimo, que perfecciona este gozo.
4.
Paciencia: Sufrimiento sin inquietud en las cosas adversas.
5.
Longanimidad: Firmeza del ánimo en sufrir, esperando los bienes eternos.
6.
Bondad: Dulzura y rectitud del ánimo.
7.
Benignidad: Ser suave y liberal, sin afectación ni desabrimiento.
8.
Mansedumbre: Refrenar la ira, y tener dulzura en el trato y condición.
9.
Fe: Exacta fidelidad en cumplir lo prometido.
10.
Modestia: La que modera, regula en el hombre sus acciones y palabras.
11.
Continencia: La que modera los deleites de los sentidos.
12.
Castidad: La que refrena los deleites impuros.


Paciencia y Mansedumbre
Los frutos anteriores disponen al alma a los de paciencia, mansedumbre y moderación. Es propio de la virtud de la paciencia moderar los excesos de la tristeza, y de la virtud de la mansedumbre moderar los arrebatos de cólera, que se levanta impetuosa para rechazar el mal presente. Estas dos virtudes combaten, pero no alcanzan la victoria sino a costa de violentos esfuerzos y grandes sacrificios; mas la paciencia y la mansedumbre, que son frutos del Espíritu Santo, apartan a sus enemigos sin combate, o si llegan a combatir, es sin dificultad y con gusto.

Longanimidad
La longanimidad o perseverancia impide el aburrimiento y la pena que provienen precisamente del deseo del bien que se espera, o de la lentitud y duración del bien que se hace, o del mal que se sufre y no de la grandeza de la cosa misma o de las demás circunstancias.
 
Bondad y Benignidad
Estos dos frutos miran al bien del prójimo. La bondad y la inclinación que lleva a ocuparse de los demás y a que participen de lo que uno tiene. No tenemos en nuestro idioma la palabra que exprese propiamente el significado de benígnitas: y la palabra benignidad, se usa únicamente para, significar dulzura; y esta clase de dulzura consiste en, manejar a los demás con gusto, cordialmente, con alegría, sin sentir la dificultad que siente los que tienen la benignidad sólo en calidad de virtud y no como fruto del Espíritu Santo.
 
Modestia
La modestia es bastante conocida como virtud. Regula los movimientos del cuerpo, los gestos y las palabras. Como fruto del Espíritu Santo, todo esto lo hace sin trabajo y como naturalmente; y además dispone todos los movimientos interiores del alma, como en la presencia de Dios.
 
Continencia (Templanza) y Castidad
Las virtudes de templanza y castidad atañen a los placeres del cuerpo, reprimiendo los ilícitos y moderando los permitidos : aquélla refrena la desordenada afición de comer y de beber, impidiendo los excesos que pudieran cometerse; ésta regula o cercena el uso de los placeres de la carne.
Mas los frutos de templanza y castidad desprenden de tal manera al alma del amor a su cuerpo, que ya casi no siente tentaciones y lo mantienen sin trabajo en perfecta sumisión.

 
VIRTUDES TEOLOGALES (No.1840 del Catecismo)
Las virtudes teologales disponen a los cristianos a vivir en relación con la Santísima Trinidad. Tienen como origen, motivo y objeto, a Dios conocido por la fe.
Las virtudes teologales son tres: la fe, la esperanza y la caridad (amor). Informan y vivifican todas las virtudes morales.
 
Fe
Es la virtud por la que creemos en Dios y en todo lo que El nos ha dicho y revelado. Por la fe el hombre se entrega entera y libremente a Dios.
 
Esperanza
Es por la que aspiramos al Reino de los cielos y a la vida eterna como felicidad nuestra, poniendo nuestra confianza en las promesas de Cristo y apoyándonos no en nuestras fuerzas, sino en el auxilio de la gracia del Espítitu Santo.
 
Caridad (Amor)
Por esta virtud amamos a Dios sobre todas las cosas por El mismo y a nuestro prójimo como a nosotros mismos por amor de Dios. El ejercicio de todas las virtudes está animado e inspirado por la caridad.


VIRTUDES CARDINALES (No.1834 del Catecismo)
Las virtudes humanas son disposiciones estables del entendimiento y de la voluntad que regulan nuestros actos, ordenan nuestras pasiones y guían nuestra conducta según la razón y la fe. Pueden agruparse en torno a cuatro virtudes cardinales: prudencia, justicia, fortaleza y templanza.
 
Prudencia
Dispone la razón práctica para discernir, en toda circunstancia, nuestro verdadero bien y elegir los medios justos para realizarlo.
 
Justicia
Consiste en la constante y firme voluntad de dar a Dios y al prójimo lo que les es debido.
 
Fortaleza
Asegura, en las dificultades, la firmeza y la constancia en la práctica del bien.
 
Templanza
Modera la atracción hacia los placeres sensibles y procura la moderación en el uso de los bienes creados.
 

 
LOS CARISMAS (No.799 del Catecismo)
Los carismas, extraordinarios o sencillos y humildes, son gracias del Espíritu Santo, que tienen directa o indirectamente una utilidad eclesial; los carismas están ordenados a la edificación de la Iglesia, al bien de los hombres y a las necesidades del mundo.
Los carismas constituyen una maravillosa riqueza de gracia siempre que se trate de dones que provienen verdaderamente del Espíritu Santo y que se ejerzan de modo plenamente conforme a los impulsos auténticos de este mismo Espíritu, es decir, según la caridad, verdadera medida de los carismas.
Por esta razón aparece siempre necesario el discernimiento de carismas. Ningún carisma dispensa de la referencia y de la sumisión a los pastores de la Iglesia. “A ellos compete sobre todo no apagar el Espíritu, sino examinarlo todo y quedarse con lo bueno”, a fin de que todos los carismas cooperen, en su diversidad y complementariedad, al “bien común”.
 
El Espíritu Santo da a algunos un carisma especial de sanación. (No.1508)
 
Son además las gracias especiales, llamadas también “carismas”, según el término griego empleado por S. Pablo, y que significa favor, don gratuito, beneficio. Cualquiera que sea su carácter, a veces extraordinario, como el don de milagros o de lenguas, los carismas están ordenados a la gracia santificante y tienen por fin el bien común de la Iglesia.
Entre las gracias especiales (carismas) conviene mencionar las gracias de estado, que acompañan el ejercicio de las responsabilidades de la vida cristiana y de los ministerios en el seno de la Iglesia.
 
Teniendo dones diferentes, según la gracia que nos ha sido dada, si es el don de profecía, ejerzámoslo en la medida de nuestra fe; si es el ministerio, en el ministerio; la enseñanza, enseñando; la exhortación, exhortando. El que da, con sencillez; el que preside (liderazgo), con solicitud; el que ejerce la misericordia, con jovialidad. Rm. 12,6-8. (2004)

 
 
Las siete formas de Pecado y su don contrario:

 Pecado                              Don
Soberbia                        Humildad
Avaricia                         Generosidad
Lujuria                           Pureza
Ira                                  Paciencia
Gula                               Templanza
Envidia                           Caridad
Pereza                            Diligencia

LOS DONES DEL ESPIRITU SANTO.

DONES DEL ESPIRITU SANTO
La vida moral de los cristianos esta sostenida por los dones del Espíritu Santo. Estos son disposiciones permanentes que hacen al hombre dócil para seguir los impulsos del Espíritu Santo.
Los siete dones del Espíritu Santo son: sabiduría, inteligencia, consejo, fortaleza, ciencia, piedad y temor de Dios. Completan y llevan a su perfección las virtudes de quienes las reciben. Hacen a los fieles dóciles para obedecer con prontitud a las inspiraciones divinas.
 
Sabiduría
Es el más perfecto de todos los Dones. El nos hace preferir los bienes celestiales a los terrenales y que encontremos así nuestras delicias en las cosas de Dios.
 
Inteligencia (Entendimiento)
Nos hace comprender mejor las verdades de la Religión.
 
Consejo
Nos da a conocer con toda prontitud y seguridad, lo que conviene para nuestra salvación y la del prójimo.
 
Fortaleza
Nos da la energía que necesitamos para resistir a los obstáculos que se oponen a nuestra santificación –para resistir las tentaciones y no caer en pecado- para despreciar el respeto humano- para perseverar durante toda la vida en el cumplimiento del deber, en la vida cristiana.
 
Ciencia
No se trata de la ciencia del mundo, sino de la ciencia de Dios, nos da a conocer el camino que debemos llegar para llegar al cielo. Este don nos hace ver todas las cosas en Dios, como creaturas suyas, como manifestaciones de su Poder, Sabiduría y Bondad infinita.
 
Piedad
Despierta un afecto filial hacia Dios a quien podemos dirigirnos con toda confianza y una tierna devoción y prontitud para cumplir con nuestros deberes religiosos.
 
Temor de Dios
Inclina nuestra voluntad a un respeto filial hacia El; nos aleja del pecado porque le desagrada y nos hace esperar en su poderoso auxilio. Para entenderse bien, este Don nada tiene de común con el temor al castigo de Dios por nuestros pecados, el temor a las penas de esta vida, a las del Purgatorio y del Infierno. Nos es el temor del esclavo que sirve al amo porque no lo cartigue, sino el temor del buen hijo que teme disgustar al mejor de los padres.
 
DESHUMANICÉMONOS!
 
En Unidad, crucemos el umbral de nuestra consciencia humana, hacia el encuentro mágico de nuestra consciencia crística; alquimia que nos concede la gracia de empezar a pensar, sentir y actuar como seres espirituales, atravesando por una experiencia humana; este clic luminoso nos despierta a la sanidad de discernir espiritualmente, aquella mentira teorizada por el intelecto, que nos divide en seres físicos, humanos y espirituales; quizá, nuestra manía humana de membretearlo todo, al argumentar separadamente la  existencia de: amor/odio, uno/otro, santo/demonio, elegido/ no - elegido, adultera la verdad divina de nuestra UNIDAD eterna.
Deshumanizarnos, activa nuestro software divino de origen; semilla celestial depositada en nuestro interior, por el Dios - Padre - Madre universal; ADN  de facultades, talentos y virtudes a ser aplicadas, en nuestra individual experiencia humana, en nuestra misión de auto ascención, santificación, espiritualización e iluminación; estado de conciencia y estilo de vida, al que TODOS, sin excepción, somos convocados, por obra y gracia de la misericordiosa democracia divina; "vosotros sóis la luz del mundo", Mateo 5:14.
Deshumanizarnos, nos constituye en UNIDAD de espíritu y materia, de divinidad y humanidad; convierte nuestra cotidianidad en el templo de la  religión del amor universal; nos multiplica en luz y santidad: "lo que con el más pequeño de mis hermanos hicieras, conmigo lo hicisteis", Jesús; abre nuestra mente a la transformación de nuestra experiencia humana terrena, en el sendero de ascención divina al Cielo que habita en nuestro corazón,  cuyo fruto espiritual ilumina, cubre y abriga todo lo que a su paso encuentra.
Deshumanizarnos, nos dispone a contemplar con ojos amorosos, aquella actitud o comportamiento excéptico, que ignora aún, las alturas espirituales a las que TODOS tenemos acceso; nos invita a trascender, desde el puerto de nuestra individualidad, hacia el infinito de nuestra universalidad; nos despierta a nuestra esencia espiritual perfecta, por perfectible, sin presumir ni demostrar nada ante los demás; " ... puede Ud. considerarse una obra concluida, sí cultiva el equilibrio, la confianza y la sensación de orgullo interior; dándose y dando a los demás la posibilidad de una plenitud humana total", Wayne Dyer.
Deshumanizarnos, es experimentar gradualmente la sublime "Victoria Secreta", de no ceder a la fútil tentación, que nos seduce a justificar la debilidad propia o ajena (concebida ésta como la impureza de dañar al prójimo), con la muletilla: "es que soy humano", "así es la vida", "así es la humanidad"; actitud que, al humanizar la mediocridad inhumana, castra nuestra potencialidad divina; revelarnos ante ella, nos compromete a erradicar de nuestro interior, la pobreza espiritual contenida en la agresión, crítica, condena, doble moral, violencia, eligiendo SER, desde la contundente trinchera de la práctica, AMOR DIVINO libre de segmentadas creencias humanas.
Deshumanizarnos, es ascender al sátori de nuestra consciencia crística, alumbrando con la luz del amor, la "creología humana" que humaniza las tinieblas de su miseria espiritual; es saber que SOMOS UNIDAD individualmente universal, que SOMOS UNIDAD de lo divino y humano, por tanto, como el Cristo, tenemos la facultad plena y total para conquistar la cima espiritual de SER PODER de LUZ, que aquí y ahora, materializa nuestra espiritualidad, y espiritualiza nuestra materialidad, en pro de un universo luminoso al unísono, sin más avaricia entre sus seres.
Entonces:
¿Empezamos a deshumanizarnos, progresiva y amorosamente, hasta divinizarnos?
Con intimo amor universal ...