Por antonio tapia
Saturday 16 november 2013
Últimamente
mientras escribo, leo o descanso, escucho a Il Divo. Voces portentosas,
canciones
preciosas. Buscan transmitir lo que cantan y no niego que actúen, me
refiero a que no sientan lo que cantan, por eso afirmo que transmiten
lo que cantan.
Lo
mismo nos pasa a nosotros. Tratamos de transmitir lo que llevamos
dentro, aquello que hemos
recibido, aquello para lo que Dios nos ha puesto aquí en el Mundo,
que no para criar malvas, para sentarnos en el sillón y fumarnos un puro
medio adormilados. Estamos para transmitir las 24 horas
en casa o fuera de ella. Pero mas de una vez hemos actuado y lo
hemos hecho tan bien que nos hubieran contratado en cualquier
casting.
La
vida algunas veces es un actuar. No nos presentamos como somos, sino
muy diferentes. Con
fulanitos somos y pensamos de una forma; con menganito de otra y con
zutanito ya no digamos. Solemos ser los mejores artistas, como
camaleones que se adaptan y se camuflan en el medio para luego
sacar esa enorme lengua con la que atrapar a su victima.
Pero
hemos de transmitir lo bueno que tenemos, que es mucho, aunque pensemos
que no valemos para
nada, que somos incapaces, que no servimos… somos valiosos. Dios no
hace nada imperfecto, somos nosotros los que todo estropeamos. Pero
somos valiosos y sabemos y valemos
mucho.
Oigo:
“ ¡ la vida es una m…!”. “¡No somos nadie!”( esto ultimo en los
velatorios)… ¡vamos que no
es para tanto!, que somos mucho, que somos hijos de Dios, es mucho,
grande y valioso. Por ejemplo, se imaginan lo orgulloso que debe
sentirse el hijo de un jeque. ¿ no lo vamos a estar nosotros
por ser hijos de Dios?. Somos lo máximo de la creación. La pena que son muchos los que suelen
pronunciar esas frases.
Un desamparado se salvó
Por causa de una buena acción
Y hoy nadie lo repudia. Aleluya.
Hermosas palabras que deberíamos
tener en cuenta,
porque cuantas veces eso se ha visto en realidad y hasta nosotros o
algunos de nosotros hemos sido sujetos activos de rehuir mas de una vez
cuando algún mendigo se nos ha acercado a solicitar
ayuda.
Hagamos el papel de nuestra vida, representemos nuestro verdadero yo y transmitamos
lo buenos que tenemos, que Dios nos ha dado. El hombre es bueno por
naturaleza, al contrario de lo que opinaba Hobbes, el hecho de que
realice
determinadas acciones se debe al mal uso de la libertad de la que
dispone, pero asi mismo Dios pone ante el hombre la posibilidad del
arrepentimiento
Porque la norma sea el amor
Y no gobierne la corrupción
Sino lo bueno y lo mejor del alma pura (Il Divo)